Kodak deja de fabricar cámaras digitales

La multinacional estadounidense tomó la decisión tres semanas después de haber pedido su quiebra. Seguirá ofreciendo el servicio de impresión de fotografías.

La drástica decisión, que se concretará durante el primer semestre de 2012, también incluye a las videocámaras de bolsillo y los marcos fotográficos digitales. La compañía, que presentó  suspensión de pagos el mes pasado, ha explicado en una nota que ampliará su programa de licencias de marca actual y buscará nuevos licenciatarios para las cámaras.

Tras esta determinación, enmarcada en el proceso de reestructuración que vive en estos momentos la compañía, Kodak explicó que centrará su negocio de consumo en la impresión de fotografías online y en tiendas, así como en las impresoras de escritorio.

La firma, fundada en 1889, señaló además que ya se ha puesto en contacto con sus principales clientes y distribuidores y que está colaborando estrechamente con ellos para asegurarse de que la transición sea fluida. La empresa norteamericana agregó que seguirá respetando las garantías de los productos que correspondan y proporcionando servicio y soporte técnico para sus cámaras, videocámaras de bolsillo y marcos fotográficos digitales.

"Desde hace tiempo, la estrategia de Kodak ha consistido en mejorar sus márgenes en el sector de dispositivos de captación, reduciendo su participación en lo que respecta a su cartera de productos, ubicaciones y establecimientos minoristas. El anuncio de hoy es el siguiente paso lógico de ese proceso, tras analizar las tendencias del sector", afirmó Pradeep Jotwani, presidente de Consumer Businesses y director jefe de Marketing de Kodak.

Además del sector dedicado a los productos de consumo, Kodak cuenta con un segmento de productos comerciales que incluye impresión digital y funcional, soluciones y servicios para empresas, y películas para el sector comercial, artes gráficas y ocio. En la actualidad, los negocios digitales de la compañía conforman alrededor del 75% de sus ingresos totales.

Sin embargo, Kodak destacó que aún conserva un sólido posicionamiento en el mercado de la imagen para uso personal. Y también indicó que entre los productos y servicios de consumo seguirá ofreciendo los kioscos fotográficos en tiendas (la firma tiene en estos momentos más de 100 mil) y minilaboratorios digitales de impresión en seco (unos 30 mil conectados a los sitios para compartir fotografías más populares de Internet); aplicaciones de Kodak para Facebook (para facilitar la creación de productos fotográficos a partir de fotos de álbumes de la red social); y Kodak Gallery (un servicio que le permite compartir fotografías a los usuarios).

Igualmente, la compañía se mantendrá en los sectores de negocio de pilas, baterías y accesorios para cámaras, y en el de películas y papel fotográfico.

La quiebra de Kodak el 19 de enero ha repercutido también en Hollywood. Entre sus principales acreedores sin garantía se encuentran los grandes estudios, a los cuales les debe millones de dólares en devoluciones de películas, que se temen que no sean devueltas.

Por otro lado, la bancarrota ha obligado a Eastman Kodak a pedir que su nombre sea retirado del teatro que alberga la ceremonia de los premios Oscar, el Kodak Theatre. Hace 10 años, la firma estadounidense acordó pagar 74 millones de dólares para que su nombre apareciera durante dos décadas en la fachada del teatro.