A los 27 años, María Kozhevnikova alcanzó el cargo de diputada en las elecciones legislativas rusas de diciembre. La modelo, que en 2010 posó para la edición local de la revista Playboy, convulsionó al país.
El partido oficialista contaba con la joven entre sus filas desde
hace tiempo, pero la asunción y posterior conocimiento de su pasado desataron la polémica en Moscú.
La política es hija de un reconocido ex jugador de hockey sobre hielo
y se hizo popular por su portada de la publicación de las "conejitas".
Su formación como líder surgió de la juventud del partido oficialista, al igual que la detective descubierta en EEUU, en 2010, Anna Chapman.
En la Cámara de diputados sostuvo que fue uno de los "eventos más importantes" de su vida. Y añadió: "Sólo soy una ciudadana común y corriente de la Federación Rusa, con los problemas que enfrentan cada día. Ahora tendré una plataforma en la que podré hablar de las dificultades y proponer soluciones".
"Creo que ahora ha llegado el momento de que la voz de los jóvenes sea escuchada.
El futuro de nuestro país pertenece a los jóvenes y también tenemos que
estar involucrados", sentenció la integrante del partido de Vladimir Putin.
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