La nueva normativa del estado norteamericano se basa en un estudio que no comparte la OMS.
Coca-Cola ha decidido modificar el proceso a través del que fabrica
su producto estrella "Coca-Cola" en California para evitar una normativa
de este Estado que le obligaría a indicar en su etiqueta que contiene
un residuo que, eventualmente, podría tener incidencia en alguna
enfermedad cancerígena.
Así lo han indicado hoy a Efe fuentes de Coca-Cola España, que han
detallado que este cambio sólo se producirá en California, a raíz de la
entrada en vigor de una nueva normativa que afecta a todos aquellos
alimentos procesados que contienen el ingrediente 4-metilimidazol
(4-MEI), más de 200 productos de distintas compañías, como el café, la
cerveza o el flan. Este residuo al que hace referencia la norma
californiana se genera al tostarse el azúcar o caramelo que lleva el
producto alimentario durante su fabricación y elaboración.
Sin embargo, las mismas fuentes han criticado una normativa que se
basa en un estudio que hablaba de una vinculación con el cáncer, pero
que fue rebatido por la Organización Mundial de la Salud, OMS, quien ya
afirmó que el riesgo entre el 4- MEI y el cáncer era menor que comer
patatas fritas hechas en casa.
En este sentido, han añadido que según estudios de la agencia
estadounidense que regula el mercado de alimentos y fármacos habría que
consumir mil litros de un refresco de cola durante dos años seguidos
para que, eventualmente, la acumulación de esos residuos pudiera tener
una incidencia en alguna enfermedad.
Han detallado que la compañía tenía que decidir si incluía en la
etiqueta de sus refrescos de cola que llevaba un residuo que podría ser
cancerígeno o bien retocar el proceso de fabricación para eliminar esa
sustancia, opción por la que finalmente se ha decidido tras investigar
el proceso que le permite fabricar el refresco sin generarla.
Fuentes de Pepsico han asegurado a Efe que la compañía ha pedido a
los proveedores del caramelo que utiliza para fabricar sus refrescos que
cambien el proceso de elaboración para que no contenga esta sustancia
afectada por la normativa del estado de California.
Las mismas fuentes, que han incidido en que no hay evidencias
científicas de que el 4-MEI sea perjudicial para la salud, han explicado
que los productos de Pepsico siguen siendo seguros para el consumo y
que la seguridad es importante y prioritaria para la compañía.
Por su parte, la Asociación Nacional de Fabricantes de Bebidas
refrescantes Analcohólicas (Anfabra) ha afirmado en un comunicado que el
citado caramelo 4-MEI, además de en los refrescos de cola, está
presente en multitud de alimentos y bebidas.
Ha precisado que se produce durante el proceso de calentamiento,
tostado, asado o cocinado, y se encuentra en pequeñas cantidades en
productos de consumo habitual, incluyendo alimentos horneados, café,
pan, miel, salsas, etc.
Según Anfabra, su uso está autorizado por la reglamentación sanitaria
de todo el mundo, incluida la FDA (Food and Drug Administration) de
EE.UU, que avala el colorante de caramelo como seguro para su uso en
alimentos y bebidas.
En el caso europeo, la máxima Autoridad Europea de Seguridad
Alimentaria (EFSA), emite periódicamente sus opiniones en las que
constata la seguridad de este colorante y que en la última revisión, en
marzo de 2011, confirmó su seguridad, ha indicado.
Ha añadido que la Asociación americana de fabricantes de refrescos
(ABA en sus siglas en ingles) emitió un comunicado en el que consideraba
la norma de California como "una barbaridad", puesto que no existe base
científica que lo sustente y que en este mismo sentido se pronunció la
FDA, que reiteró que no hay ninguna razón para crear este tipo de
alarmas en los consumidores.
Ha recordado que el pasado mes de enero el estado de California
añadió el 4-MEI a una lista de 500 sustancias que cree que podrían
llegar a ser potencialmente cancerígenas.
Según Anfabra, esta decisión política no está basada en estudios
contrastados, ya que no existe ninguno que demuestre que el 4-MEI tenga
estos efectos, y se basó en estudios en ratones y ratas de laboratorio,
no en humanos.
Junto a Coca-Cola, el resto de fabricantes de refrescos, como
Pepsico, ha decidido adaptarse a la situación específica californiana y
ha solicitado a los proveedores de caramelo que pongan en marcha las
modificaciones en el proceso de fabricación que consideren necesarias
para cumplir con la legislación y las pautas de etiquetado de
California, según ha detallado Anfabra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario